domingo, 20 de septiembre de 2020

Bloom de Salvador Bachiller

Hola a tod@s!

¿Qué tal lleváis este final del verano? Yo la verdad es que intentaba disfrutarlo hasta el último día, pero ya solo puedo salir de casa para trabajar... creo que va a ser un otoño/invierno muy largo y demasiado triste, pero eso ya lo plasmaré en otra entrada.

Hoy quiero recomendar un sitio de los que a mi me gustan, súper cuqui. 
Es el restaurante Bloom de Salvador Bachiller en la calle Alberto Aguilera de Madrid.
Hace 1 año aproximadamente empezaron a hacer obra en la tienda y ya ponían que iba a ser un restaurante... Con el confinamiento y demás se paralizó mucho, pero creo que en el mes de Julio vi que lo abrieron y ya estaba esperando el momento de ir a comer allí. 



El jueves pasado reserve para ir a cenar con una amiga después del trabajo, ya que me queda al lado.

El sitio es como estar dentro de cuento de princesas, todo lleno de flores, rincones con mucho encanto, reservados, todo muy rosa incluso podría decir que un poco cursi, pero me encanta!! Tal y como es la traducción al español, Bloom es florecer!

Para entrar en los salones hay que bajar una escalera que ya te deja impresionada, está adornada con flores toda ella, nos sentaron en un saloncito al lado de un almendro en flor, una auténtica pasada. Las mesas entre los comensales guardan bastante la distancia de seguridad.

El almendro

Al sentarnos la chica que nos acomodó nos dejó una caja para cada una para guardar la mascarilla mientras estás sentado, al levantarte o ir al baño es obligatoria. Un detalle útil y original, encima la caja es una monada.

Caja para mascarilla

Tanto los platos, copas, menaje...lo venden en la tienda, así que si te gusta algo ya sabes donde puedes conseguirlo.

Vajilla

La variedad de comida no está mal, aunque parece que algunos de los platos no pegan mucho con el sitio en el que estás. La carta.

Nosotras para beber pedimos cerveza y de comer, nachos, pizza y tikka masala. 
Al sentarnos nos pusieron un canapé de hummus de remolacha con tomate cherry.
Tras terminar con los nachos, que pedimos los tradicionales, nos trajeron la pizza, la de mortadela y alcachofas. A parte de estar riquísima está super bonita decorada. Al ver el tamaño de la pizza dijimos a camarera que nos anulase el pollo ya que nos parecía demasiado para la cena.

Nuestra cena

Aunque pensábamos no pedir postre nos decidimos por un coulant de chocolate con mermelada de rosas y presentada como si fuera la rosa de la Bella y la Bestia.

Yo muy "Bella"


Nos trajeron la cuenta y aunque no es barato, ya que los precios de las bebidas me parecen un poco elevados, es un precio normal para la cantidad y la calidad servida.
Está claro que el sitio hay que pagarlo y entiendo algunos precios, pero una copa de vino 6€ para una botella que te venden entera por 20€, me parece un poco exagerado, creo que es el único "pero" que puedo poner al lugar.


 Ah! cómo yo soy super cotilla aproveché para ir al baño y ver cómo era y qué deciros, que hasta el baño es precioso.

Todo al rosa

Sin duda es un sitio al que ir,con amigas o con una persona especial, ya que quizá sea muy recargado y romántico para ir con cualquier conocido.

Rincones

Al salir fuimos a ver otros ambientes del restaurante, hay una sala con espejos y techo con unas cristaleras alucinantes, un reservado ideal para celebrar un cumpleaños o un evento.


Y para terminar pedimos a la camarera que nos sacara una foto en las escaleras, ella super amable nos dijo que sin mascarilla saldría más bonito, así que para la foto nos la quitamos.

Mi compañía para la cena

Y hasta aquí mi entrada de hoy, echaba de menos ir a sitios nuevos y poder recomendarlos, porque este sin duda no os dejará indiferente.

Para la próxima semana habrá nueva entrada. Ya que no podré salir de mi  barrio porque es uno de los que han confinado, así que escribiré y el tema será ese, el confinamiento por barrios.

Feliz semana y puntitos para tod@s!
























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